lunes, 30 de agosto de 2010

la inmadudrez

                                      LA INMADUREZ
Inmadurez: Persona que no ha llegado a termino en el desarrollo de todas o algunas sus capacidades como ser humano

Implica una perspectiva ingenua e intolerante ante ciertas situaciones de la vida, generalmente incomodas o desagradables. Entonces una persona que no haya desarrollado la madurez o la inteligencia emocional adecuada tendrá dificultades ante el sufrimiento (dolor) la frustración (perdida) y la incertidumbre ( no saber que va a pasar en el futuro).


el orgullo


El Orgullo


No necesitamos el orgullo para vivir, de hecho si somos personas orgullosas nos perderemos muchas de las cosas buenas que nos puede ofrecer la vida.

¿DE DÓNDE VIENE EL ORGULLO?


A. Del corazón

B. Del conocimiento de la ciencia del mundo
C. De un apellido ilustre
Gran honor, el nombre de Cristo

D. De una posición importante

1. Ser ancianos, puede hacerles orgullosos

2. Tener un título de doctor, ingeniero etc.....

E. El poder y las riquezas pueden ocasionar orgullo
F. Realizaciones pueden ocasionar orgullo

la hipocrecia

La hipocresía es el acto de pretender constantemente tener creencias, opiniones, virtudes, sentimientos, cualidades, o estándares que uno en realidad no tiene. La hipocresía es así un tipo de mentira.




La hipocresía puede venir del deseo de esconder de los demás motivos reales, o sentimientos. La hipocresía no es simplemente la inconsistencia entre aquello que se defiende y aquello que se hace.



Para el lingüista y analista social Noam Chomsky, la hipocresía, definida como la negativa a "...aplicar en nosotros mismos los mismos valores que aplicamos en otros",[1] [2] es uno de los males centrales de nuestra sociedad, que promueve injusticias como la guerra[3] [4] y las desigualdades sociales en un marco de autoengaño, que incluye la noción de que la hipocresía por sí misma es una parte necesaria o benéfica del comportamiento humano y la sociedad.[5] [6]



En muchos idiomas, incluido el francés, un hipócrita es alguien que esconde sus intenciones y verdadera personalidad.



El machismo

                                             EL MACHISMO


El machismo es el conjunto de actitudes y prácticas aprendidas sexistas vejatorias u ofensivas llevadas a cabo en pro del mantenimiento de ordenes sociales en que las mujeres u otros grupos sociales percibidos como más débiles son sometidas o discriminadas. Se considera el machismo como causante principal de comportamientos heterosexistas u homofóbicos. Esta conducta permea distintos niveles de la sociedad desde la niñez temprana hasta la adultez con iniciaciones de fraternidades y otras presiones de los llamados grupos paritarios.

Machismo


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El machismo es el conjunto de actitudes y prácticas aprendidas sexistas vejatorias u ofensivas llevadas a cabo en pro del mantenimiento de ordenes sociales en que las mujeres u otros grupos sociales percibidos como más débiles son sometidas o discriminadas. Se considera el machismo como causante principal de comportamientos heterosexistas u homofóbicos. Esta conducta permea distintos niveles de la sociedad desde la niñez temprana hasta la adultez con iniciaciones de fraternidades y otras presiones de los llamados grupos paritarios.



lunes, 23 de agosto de 2010

la sexualidad humana

La sexualidad humana representa el conjunto de comportamientos que conciernen la satisfacción de la necesidad y el deseo sexual. Al igual que los otros primates, los seres humanos utilizan la excitación sexual con fines reproductivos y para el mantenimiento de vínculos sociales, pero le agregan el goce y el placer propio y el del otro. El sexo también desarrolla facetas profundas de la afectividad y la conciencia de la personalidad. En relación a esto, muchas culturas dan un sentido religioso o espiritual al acto sexual, así como ven en ello un método para mejorar (o perder) la salud.


La complejidad de los comportamientos sexuales de los humanos es producto de su cultura, su inteligencia y de sus complejas sociedades, y no están gobernados enteramente por los instintos, como ocurre en casi todos los animales. Sin embargo, el motor base del comportamiento sexual humano siguen siendo los instintos, aunque su forma y expresión dependen de la cultura y de elecciones personales; esto da lugar a una gama muy compleja de comportamientos sexuales. En la especie humana, la mujer lleva culturalmente el peso de la preservación de la especie.
En la sexualidad humana pueden distinguirse aspectos relacionados con la salud, el placer, legales, religiosos, etc. El concepto de sexualidad comprende tanto el impulso sexual, dirigido al goce inmediato y a la reproducción, como los diferentes aspectos de la relación psicológica con el propio cuerpo (sentirse hombre, mujer o ambos a la vez) y de las expectativas de rol social. En la vida cotidiana, la sexualidad cumple un papel muy destacado ya que, desde el punto de vista emotivo y de la relación entre las personas, va mucho más allá de la finalidad reproductiva y de las normas o sanciones que estipula la sociedad.


                                                ¿CUÁLES SON SUS LÍMITES?

En la intimidad de su conciencia todo hombre puede descubrir sus derechos y deberes fundamentales, que comparte con los demás miembros de la sociedad. Por eso es preciso que la objeción de conciencia vaya precedida de una reflexión serena y desinteresada sobre los propios derechos y deberes.

Parece casi fuera de discusión que el respeto y la protección de la vida constituye un derecho básico, posiblemente el primero de los derechos humanos, pues de él depende el ejercicio de todos los demás derechos. De la misma manera es un deber fundamental mantener la vida en las mejores condiciones posibles de salud para poder participar en la construcción conjunta de la sociedad. Por tanto, una objeción que exigiera el derecho a la vida pero rechazara el deber de colaborar en la riqueza común, no podría ser tenida por honesta y merecedora de atención.
De forma similar, cada uno disfruta del derecho a ser protegido en su salud y respetado en la propiedad, fama, intimidad, religiosidad y conciencia. Pero cada uno tiene también el deber de proteger la salud y la vida del otro, y de respetar su propiedad, fama, intimidad, religiosidad y conciencia. Por tanto, no sería creíble una objeción que reclamara un derecho pero lo hiciera con violencia o desatendiendo deberes incuestionables de solidaridad social.

En consecuencia, un límite claro a la objeción será la honestidad de conducta, que habrá de traducirse en una forma de vida coherente con los principios que declara, donde el tenor de vida personal se muestre en la manera en que se afrontan las propias responsabilidades sociales.

                                     sexualidad humana,vista un tema superficial
Definitivamente existen varios conceptos acerca de la sexualidad humana que son dignos de análisis. Nuestra sociedad tiende a manejar ideas muy superficiales sobre el tema; esta superficialidad afecta de manera alarmante el proceder del ser humano respecto a dicha cuestión. El concepto reduccionistade la sexualidad tiende a definirla como una serie de sensaciones puramente físicas siempre relacionadas con el placer y el actuar cuasi animal del hombre.El reduccionismo se conforma con lo que se ve y con lo que se siente; lo demás es relativo y fuera de toda comprobación. Dicho en términos llanos, para el reduccionista convencional, la sexualidad es lo genital.




Nuestra sociedad esta llamada a trascender el “genitalismo” y empezar a hablar de sexualidad en términos más completos, tomando en cuenta a la persona como un universo. La sexualidad toca toda la persona: desde el pensamiento y sentimiento hasta la sensación y el proceder. El comportamiento humano se determina las más de las veces por su género, por su sexo. Lo masculino y lo femenino son complementariamente diferentes. De tal manera que no podemos reducir a la sexualidad a una sola parte de nuestro cuerpo o a una sola actividad humana: tan sexuado es un órgano genital como lo puede ser nuestra frente; la comprensión a tu pareja constituye una relación sexual como también la supone el coito. Tenemos entonces una visión global de la sexualidad humana, una visión que no reduce al sexo a una actividad específica, ésta es más bien un sistema interdependiente que abarca a la persona como un todo y que sobre la base de una relación sexual bien entendida, esta diseñada para la felicidad del individuo.



Existen tres elementos presentes en la sexualidad humana que la distingue claramente de la sexualidad animal. Si se hace un análisis superficial de estas diferencias pudiéramos caer en la conclusión falaz de que el ser humano es imperfecto en cuanto a sexualidad se refiere; pero un análisis profundo dará como resultado –como ya lo veremos, que la sexualidad humana implica una comunicación total entre la pareja.



La Curva de Excitación del hombre y la mujer es significativamente diferente. Mientras que el hombre alcanza la excitación casi inmediatamente y la ascendencia al punto más alto es más bien trepidante, la mujer se distingue por ser mucho más pausada alcanzando picos alternados. El regreso al punto de equilibrio en el hombre es también vertiginoso, entre tanto que la mujer desciende acompasadamente. A simple vista, como mencionaba en el párrafo próximo anterior, tales distingos suponen para las mentes ociosas una imperfección en la naturaleza humana. Precisamente por eso, explican algunos, existe tanta incompatibilidad –y frustración sexual entre muchas parejas. Nada más alejado de la realidad. Si se reduce la sexualidad humana a la simple cópula, no existe la menor duda que las diferencias prevalecerán sobre el complemento. Sin embargo, la clave se encuentra en la perspectiva del quehacer sexual del ser humano; si se entiende la sexualidad como un conocimiento total de la pareja que engloba la dignidad humana, podremos entender que tales diferencias pueden ser subsanadas con el entendimiento mutuo, la comunicación, el saber esperar, el comprender que lo que se busca no es la unión simplista de los cuerpos, sino el encuentro de personas. Para lograr tal encuentro y lograr conjugar las diferencias que al principio del párrafo se describen, es necesario conocerse integralmente; no sólo el cuerpo, sino el alma y el espíritu. No sólo buscar el placer personal, sino expresar el amor verdadero a la pareja en toda su condición como persona.